Prácticas en el exterior: el plus de la experiencia - Universitarias

Francisco Risso Patrón, estudiante avanzado de Ingeniería Industrial de la Facultad de Ingeniería Química (FIQ) de la UNL, está muy próximo a terminar su carrera. Pero el joven decidió sumar experiencia a su trayecto de formación académica con una práctica profesional y el aprendizaje de un idioma extranjero. Así, beneficiado con una beca del gobierno oriental, viajó a China en agosto de 2009 y, una vez que terminó de aprender mandarín, comenzó como practicante en la planta de la firma Sadesa (producción de curtiembres).

La fábrica se encuentra ubicada en el extremo sur de China, muy cerca de la localidad de Macao, Hong Kong. “Desde que llegué al continente asiático estuve tratando de buscar un lugar donde hacer mis prácticas profesionales, finalmente conseguí aquí en Sadesa”, contó el alumno. Dentro del lugar de trabajo, Francisco se comunica perfectamente en el idioma chino: “Cuando llegué a la fábrica los empleados no podían creer que les hablara en su propia lengua. Hoy, mi trabajo consiste en revisar el actual diseño (layout) y movimiento de materiales e insumos en la planta, con el objetivo de perfeccionarlos”, precisó.

Para el joven, la experiencia ha sido muy enriquecedora respecto del aporte que significa para su formación académico-profesional, pero también en lo personal. Es que regresará a Santa Fe en octubre de este año con el objetivo de finalizar su carrera, pero no lo hará solo, sino que estará acompañado por su reciente esposa. “Mi mujer se llama Zou Di y es una chica china con quien contraje matrimonio el pasado 1º de agosto”, contó Risso Patrón.

Oportunidades

El practicante no pudo disimular su entusiasmo por la industria del país oriental. Relató que “siempre que pude entré a las fábricas chinas para ver cómo es la manera de trabajar que tienen aquí. Estuve en fábricas de zapatillas, de camperas, de tapados de piel, etc. También tuve la oportunidad de visitar una línea de Volkswagen donde salían los autos a un ritmo de uno por minuto. ¡En una sola línea de producción!”, contó con asombro.

“Estuve en los mercados de industria liviana más grandes de china. Los mercados son predios tan grandes como un pueblo o una ciudad chica argentina, no hay persona capaz de recorrerlos enteros. China es una tierra de oportunidades. Es una economía en constante crecimiento, la gente es optimista y, en poca o mucha medida, prospera”.

El joven quiso agradecer la hospitalidad de quienes lo recibieron y alojaron: “Los directivos e ingenieros de Sadesa son unos caballeros, me han hecho sentir como en casa y, bajo la tutoría del gerente de planta, estoy aprendiendo mucho”, cerró.

Fuente: El Litoral