Trabajar en una oficina ya no es como antes, donde había que ir súper formal, con colores neutros y conjuntos acartonados.
Hoy, los códigos de vestir se han relajado mucho, y en la oficina se han encontrado nuevos lenguajes de elegancia y estilo que te permiten vestir bien, sin dejar a un lado la moda.
Acá les presentamos diez reglas infalibles para lograr un look ejecutivo sin perder el estilo de cada una y “la onda”
1.- Nada muy revelador.No hay que llevar polleras demasiado cortas o blusas escotadas a trabajar.
2.- Sí a las camisetas,siempre y cuando se lleven bajo otra prenda: un saco, un suéter o una camisola.
3.- El maquillaje es fundamental,pero hay que evitar siempre el exceso. Un detalle llamativo es suficiente.
4.- La joyería es un gran aliado de la mujer que trabaja.Unos aros importantes, un collar, broche o anillo vistoso le darán diversión a tu atuendo. Sólo procura que no sea demasiado cargado de cristales y brillo.
5.- Las fragancias son parte de tu personalidad,pero no te bañes en ellas, ni uses aromas demasiado invasivos, especialmente si tu trabajo es muy encerrada y trabajas con más personas.
6.- Hay empresas que permiten el uso de los jeans,sólo estate atenta a que los que uses no estén rotos o demasiado decorados, entre otras cosas porque son poco versátiles y combinables.
7.- No lleves cortes muy extremos o colores extravagantes.El cabello es fundamental a la hora de marcar la presencia y la prolijidad es primordial en la oficina.
8.- Viernes casual.Sport no significa crota. No vayas de calzas o zapatillas rotas a trabajar los viernes. Únicamente relaja un nivel la ropa que sueles usar el resto de la semana: jeans, una camiseta y un saco con zapatos bajos es un buen ejemplo de viernes casual.
9.- ¿Medias?Sí se llevan, pero las más divertidas: con textura, puntitos, oscuras, mates. Las de lycra brillante olvidalas.
10.- Los zapatos de taco te dan un gran porte,una fuerza y feminidad únicas. Pero evitá los muy adornados y brillantes, mejor reservalos estos para ir de fiesta.
Fuente: El Día